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viernes, 20 de marzo de 2009

LA DETERMINACIÓN DEL PRECIO Y SU IMPLICANCIA EN LAS FINANZAS

Una de los temas que siempre enfatizo en mis cursos y exposiciones es que “Los recursos siempre son escasos”. Por este motivo y para asignarlos de la mejor manera existe la economía como ciencia social mientras que el rol de las finanzas es para su aplicación práctica dirigida a la organización. Por tanto, las finanzas facilitan el manejo de los recursos escasos de la organización y de las familias.

El campo de acción de las finanzas es el futuro, pero en función de los realicemos en el presente, tal como dice el gran gurú de los Negocios Modernos, Tom Peters “Pensemos en el futuro, pero actuemos en el presente (Hoy)”, por ello las finanzas permanentemente eligen opciones a tomar. Para elegir se necesitan datos claros y actualizados, señales claras y una de estas grandes señales son los precios. Los poderosos, pero a veces olvidados precios.

La determinación de los precios de nuestros productos, es hoy toda una ciencia pero también un arte. Los precios originan y sustentan todas las decisiones principales de uso de recursos, tanto para el consumo como para la inversión y producción. El sistema de precios define la eficiencia y transparencia de un sistema económico. Si este sistema no funciona o está intervenido artificialmente se genera desperdicio, ineficiencia, mercado negro y corrupción. i para que las decisiones sean eficientes, las señales, los precios, deben ser las correctas.

DETERMINACIÓN DE LOS PRECIOS

Entonces, ¿cuál es el mejor sistema de determinación de los PRECIOS? : El mercado, la interacción libre y la competitiva entre los que demandan y los que ofrecen. ¿Quién mejor que los propios agentes para negociar los precios, de tal manera que los resultantes reflejen la disponibilidad y deseabilidad reales de los bienes y servicios cuyo valor representan? El Estado debe promover la competencia, el Estado debe evitar los abusos y en algunos casos fijar techos con transparencia, pero nunca forzar una situación artificial. Tarde o temprano la realidad (el mercado) se impone, y lo único que consigue la medida es desperdicio de tiempo y recursos escasos por decisiones erradas basadas en señales alteradas.

Finalmente, cuando en nuestras organizaciones se tome una decisión que conlleve a proyectos los resultados esperados, debe tomar en cuenta que debemos de observar, evaluar y comparar los precios actuales y proyectados, además preguntemos primero: ¿Estos precios son reales y sostenibles? ¿Son precios que podrán ser aceptados por mi mercado? ¿Cuál es la mejor estrategia para establecer este precio en el mercado? Hágase las preguntas que sean necesarias, tal vez esto nos ayudara a tomar una mejor decisión antes de perder nuestra participación de mercado

Éxitos!!!

JORGE DEL CASTILLO CORDERO